Fin de semana en Londres: volar barato, qué hacer y dónde comer
Después de Bangkok –la capital de Tailandia–, Londres es la ciudad más visitada del mundo con 20 millones de personas en 2017. Más que París, Dubái o Nueva York. Es evidente que es un destino con muchísimo interés. Tiene de todo. Museos, espectáculos, tradición, cocinas de todo el mundo, diversión... Y para todos los públicos.
No cabe duda que no es fácil ir a Londres en un par de días o incluso solo disponer de 24 horas y conocerla a fondo. Para eso, necesitas unos cuantos viajes más. Hay tanto que ver y que hacer. Pero la vida es así: lo normal es que solo puedes escaparte uno o dos días y punto. Así que si únicamente disponemos de un tiempo limitado, es decir un fin de semana o 48 horas por ejemplo, hemos preparado una guía rápida para poder exprimir al máximo esta ciudad tan versátil.
Antes de partir, los vuelos baratos a Londres
Si te escapas un fin de semana a Londres, lo habitual es que salgas el viernes a mediodía o por la tarde, una vez has acabado la jornada laboral. Los billetes de avión entre las ciudades españolas y la capital de Gran Bretaña son muy frecuentes y no es nada complicado encontrar vuelos baratos. Es mas, es lo normal. Hay mucho donde elegir –hay 26 ciudades españolas que llegan sin escalas a Londres–, lo que significa que los precios son bastante asequibles, especialmente los vuelos low cost. Básicamente hay 4 aeropuertos a elegir: si luego vas a coger transporte público hasta el centro de la ciudad, los más recomendables serían Heathrow, al oeste, y Gatwick, al sur, luego Stansted, al norte, y Luton, al noroeste.
Londres para todos los públicos
Piensa que esta es una ciudad que se adapta bastante bien a los gustos del viajero. Este artículo de hecho está enfocado para aquellos viajeros que van a Londres por primera vez, pero lo cierto es que se trata de una opción muy aconsejable si viajas con niños (mírate esta guía), o si te apetece más un plan romántico con tu pareja o si es una salida con amigos y tienes planeado salir por la noche. Hay para todos.
EL VIERNES
Al atardecer
Como decíamos antes, lo normal es que aterrices en Londres el viernes al atardecer. Vas al hotel y dejas las maletas. Si es así, la sugerencia es ir directamente al mismísimo corazón: iniciar el fin de semana viendo en el Big Ben anocheciendo es todo un regalo. Y caminar por Westminster Bridge, donde tendrás las mejores vistas de las Casas del Parlamento y del Big Ben. Depende del tiempo que tengas y las energías que te resten, lo suyo también sería recorrer Piccadilly Circus, Leicester Square y Covent Garden y pasear por el río. Si tienes tiempo, plantéate la opción de montar en el London Eye y luego cenar por allí cerca, en Southbank, donde hay bastantes restaurantes orientales e italianos de buena calidad.
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SÁBADO
Por la mañana
Según nuestra experiencia, si nunca has estado en Londres anteriormente, hay algunos puntos de interés importantes que deberías tener en cuenta antes que nada. Lo que se llama "los imprescindibles". El palacio de Buckingham se encuentra a escasa distancia y está abierto al público desde el 23 de julio hasta el 2 de octubre, pero la reserva previa es indispensable. También más o menos cerca (al otro lado del puente) como señalábamos antes, se levanta el London Eye (la noria gigante).
Si el clima es húmedo (ya sabes, esto es Londres), la buena noticia es que existe mucho donde elegir cuando se trata de adentrarse precisamente en museos o galerías de arte. Las exposiciones permanentes del British Museum, el V&A, el Science Museum, el Tate Modern y el Imperial War Museum no te costarán ni un centavo (eso sí, los eventos especiales pueden tener un coste).
Por la tarde
La construcción del Shard de 95 pisos finalizó en febrero de 2013, convirtiéndolo en el edificio más alto de Londres. Si bien es posible visitar la plataforma de visualización View from the Shard, una mejor opción es reservar el almuerzo o el té de la tarde en los restaurantes Oblix o Aqua Shard en los pisos 31 y 32. ¡Las vistas se extienden hasta 50 kilómetros de distancia!
También a poca distancia está la exposición Tower Bridge. Las entradas para adultos cuestan unas 9 libras e incluyen acceso a la plataforma de vidrio que se extiende sobre el Támesis a 40 metros de altura.
Por la noche
Ver un espectáculo en el West End de Londres es una de las experiencias de Londres por excelencia. Si no has reservado entradas con antelación, prueba a llamar al teatro el día mismo para ver si han tenido alguna devolución de último minuto. Las taquillas en los alrededores de Leicester Square generalmente no ofrecen un gran descuento en los espectáculos más populares, por lo que a menudo vale la pena preguntar en el teatro directamente.
Muchos de los restaurantes de los alrededores ofrecen un razonable menú pre-show de 17:30h a 19:00h de la tarde. Si te entra el hambre después, las opciones nocturnas en el West End incluyen el Soho Kitchen and Bar para comida americana hasta por lo menos medianoche; y The Royal Dragon Restaurant y Karaoke en Chinatown.
DOMINGO
Por la mañana
Olvídate de Oxford Street, Bond Street o Harrod's. Para conocer la genuina experiencia de “shopping” en Londres, pon rumbo a uno de los muchos mercadillos que hay en la ciudad. Los madrugadores podrán ver a los verdaderos comerciantes trabajando en el mercado de pescado de Billingsgate de 4h a 8h de la mañana (de martes a sábado) o en el mercado de carne Smithfield (de lunes a viernes a partir de las 7h de la mañana).
Y claro, pasar tanto tiempo envuelto por todos los productos frescos puede provocar que se te despierte el apetito repentinamente. En ese punto, recomendamos dirigirse a Borough Market para almorzar temprano. Esta meca es ideal para los amantes de la comida. Es el hogar de más de 100 puestos que venden todo tipo de cocina gourmet. También es el lugar donde podrás encontrar un punto de Monmouth Coffee, proveedores de las mejores bebidas con cafeína de la capital.
Por la tarde
Para una perspectiva alternativa de Londres, dirígete al atardecer hacia el norte hasta Hampstead Heath. La manera más fácil ir desde Borough a la cercana Waterloo, saltar a la línea Northern y tomar el metro hacia Belsize Park. Desde allí hay un momento, un ratito hasta los 3.000 metros cuadrados de Hampstead Heath. Mejor aún, ve por Hampstead High Street Hampstead. Es pintoresco y recuerda a un pueblo rural, con muchas tiendas boutique para ver a lo largo del camino.
The Heath por si solo ya tiene vistas panorámicas de Londres en su punto más alto, y el Spaniard´s Inn, en el extremo norte, es el lugar perfecto para tomar una copa antes de volver a la ciudad. El pub data del año 1.585 y es uno de los más antiguos de Londres. Si da la casualidad que andas por allí un domingo, las cenas de asado son obligatorias.
Por la noche
Está claro que no hay escasez de restaurantes en Londres. Pero para una última noche, no te debes perder el Madison's, cerca de St Paul's. Es conocido por sus cócteles y las impresionantes vistas de la catedral desde la terraza de la azotea. Piensa que los platos que te servirán no son muy comunes: el filete de 35 días, el vientre de cerdo confitado y el queso de macarrones con trufas son extraordinarias muestras.
Por otra parte, Seven Park Place by William Drabble, un restaurante estrella Michelin, en St James's Hotel and Club, está constantemente calificado como uno de los mejores restaurantes de la capital. El menú de inspiración francesa ofrece platos de autor, como cola de langosta cocida con puré de coliflor. Solo hay nueve mesas, por lo que la reserva con tiempo es una obligación.