Descubre Singapur por un 1€
En la actualidad, muchos viajeros que deciden visitar Asia optan por convertir su escala en Singapur en una estancia algo más duradera y descubrir así esta fascinante ciudad de contrastes. Esta parada es lo que se llama un stopover. Pues, atentos al dato: la aerolínea Singapore Airlines acaba de lanzar una promoción con la que, al hacer un stopover en Singapur y por tan solo 1€ –normalmente pagarías 39€–, te ofrecen: una noche de hotel, traslado desde el aeropuerto al hotel, acceso a más de 20 atracciones de la ciudad y ofertas exclusivas para restaurantes locales. Sin duda, el plan perfecto para descubrir la perla asiática y añadir una nueva experiencia a tu viaje final. ¡No te pierdas este vídeo para saber más!
Pero aquí no acaban las ventajas. Al hacer escala en Singapur con Singapore Airlines –galardonada con el premio a la "Mejor Tripulación de Cabina del Mundo" en los premios Skytrax 2019– es que el vuelo de España a Singapur es directo (unas 12 horas de duración), por lo que, tras tu stopover solo te quedarán unas pocas horas para llegar a tu destino final. ¡Ideal!
La promoción del Stopover por 1€ se puede reservar hasta el 31 de marzo de 2020 para viajar hasta el 31 de diciembre del mismo año. A partir del 1 de abril, se podrá seguir adquiriendo el Singapore Stopover Holiday, pero al precio habitual (es decir, 39€).
Y ¿cómo se puede reservar el Singapore Stopover Holiday? Hay tres maneras muy sencillas:
- Ponerse en contacto con la agencia de viajes habitual
- Llamar a Singapore Airlines al 93 740 58 22
- Reservar online a través de la web de Singapore Airlines
Pero, ¿realmente se puede visitar Singapur en un solo día?
Ya hemos hablado del tamaño de Singapur. Es más bien reducido: de punta a punta se recorre en una hora. Por lo que la respuesta es sí: se puede explorar en un día perfectamente. Hay que tener en cuenta que Singapur ha sido designada como la ciudad más inteligente del mundo en el Smart City Expo World Congress de 2018. Por algo será. Su sistema de transporte es altamente eficiente –además de económico, por cierto–, lo que permite moverse de un lado a otro de forma muy rápida.
Eso sí, se puede hacer en un día, pero depende un poco de ti, de tu rapidez y de los que te apetezca ver. Hay que planificarlo bien. A continuación te explicamos cómo.
Una ciudad limpia, bien conectada y amable
Una de las primeras cosas que percibe un visitante al aterrizar en el casco urbano de Singapur es lo limpio y ordenado que está todo. Las imágenes de calles caóticas, motocicletas y coches circulando frenéticamente o el cielo saturado de polución es de otras ciudades asiáticas, no pertenecen a Singapur. Si a eso le añadimos que uno de los idiomas oficiales es el inglés, que los taxis están siempre atentos y son baratos, que los metros y trenes son rápidos y la isla es muy manejable (40 kilómetros de ancho), comprobarás lo sencillo que es moverse por esta ciudad.
Subirse a la noria de 165 metros de altura
Las vistas desde lo alto de la Singapore Flyer son asombrosas. Es la segunda noria más alta del mundo. Te pone la piel de gallina. La cabina es muy grande, caben 28 personas y se puede caminar sin sentir ninguna vibración. Una vuelta completa dura 30 minutos. Es una magnífica manera de empezar tu visita o acabar el día disfrutando de uno de los mejores atardeceres que jamás hayas visto.
Kampong Glam
Este barrio árabe de Singapur es probablemente la mejor opción para comenzar a visitar la ciudad. Hay que coger el metro y bajarse en la parada Bugis. Y desde allí, unos 10 minutos hasta la Mezquita del Sultán. Todo fluye alrededor de ese punto. Fundada por los inmigrantes mercaderes malayos y árabes, en este barrio puedes encontrar casi de todo: telas, saris, batiks, alfombras, especias y perfumes.
Pasear en trishaw por el Little India
Tras recorrer Arab Street, mientras disfrutas de sus tiendas, verás como todo se va transformando de la estética árabe a la india, hasta que desemboques en el epicentro del bullicioso barrio indio. Como no dispones de mucho tiempo, lo aconsejable en este caso es coger un trishaw (bicis de tres ruedas) y dejarte llevar por las callejuelas, entre los templos hinduistas, las tiendas y centros comerciales. Por cierto, puedes pedirle al conductor de la bici que te ponga música.
Una foto del Marina by Sands
Al salir del barrio indio, vas percibiendo como se asoman de pronto los altos edificios y todo se vuelve más moderno. Van apareciendo la Catedral de Sant Andrew, el War Memorial Park, el Parlamento y otros edificios oficiales, hasta que más adelante alcanzas el Merlion Park. Singapur tiene un símbolo curioso allí. En el centro del parque, hay una estatua de grandes dimensiones (9 metros de altura), mitad león mitad pez, que representa el origen pescador de la ciudad. Precisamente desde allí se toman las típicas fotos del Marina by Sands –es el hotel donde está la piscina de borde infinito más alta del mundo– y de los rascacielos del centro financiero como sobresaliendo de la bahía. Vale la pena dar un paseo de unos 3 a 4 kilómetros para conocer esta zona, entre Boat Quay y los 64 rascacielos del Downtown Core.
Comida en los Hawker de Chinatown
A unos 10 minutos caminando del downtown, llegamos al barrio de Chinatown. Es espectacular. Color, alegría y un ambiente pintoresco. Es China en estado puro. Antiguas casas coloniales, mercadillos, santuarios, templos budistas y farolillos rojos adornando las exóticas calles. El corazón está en Kreta Ayer Square. Pero en el barrio chino lo que hay que hacer es comer en sus puestos callejeros (los Hawker). Es bueno y barato. Y por la mañana o al mediodía, un abundante almuerzo sienta de maravilla: pastel de zanahoria, tostada con kaya (mermelada de coco); el chili crab (cangrejo); el Masala Dosa, un sabroso curry de patata; un Chwee Kueh (pastel de arroz) o un plato malayo llamado Nasi Lemak (cereales con leche de coco). Y con el estómago lleno, todo se ve de otra manera.
El espectáculo de Gardens by the Bay
Desde Chinatown a Gardens by the Bay hay una distancia considerable, por lo que es recomendable coger el metro y parar en Bayfront. Cuando te adentras en este enorme jardín es cuando te das cuenta que Singapur no es una ciudad como las demás. Es otra galaxia. O mejor dicho, es el futuro. Estos dos invernaderos cuentan con especies de árboles y flores de todo el mundo, grandes cascadas y lagos. Pero lo que más llama la atención son sus árboles gigantes de metal con 25 y 50 metros de altura, los Supertree Glove, que se iluminan por la noche con la luz solar recogida durante el día.
Por cierto, bajo los árboles artificiales, cada tarde, da comienzo el Garden Rhapsody Light Show, un espectáculo donde luces, colores y música se unen para alegrar a las cientos de almas viajeras que se acercan a verlo.
Diversión en Isla Sentosa
Esta visita es una opción que dependerá mucho del tiempo del que dispongas, puesto que es un destino en sí mismo. Tal vez le deberías dedicar un día entero. Su nombre significa paz y calma en malayo, aunque rápidamente te darás cuenta que es justo lo contrario. Se trata de la tercera isla más grande del país y está repleta de todo tipo de atracciones a elegir: como sus playas, el mirador Tiger Sky Tower, actividades de aventura o el famoso parque de atracciones Universal Studios. En ese sentido, es una decisión muy adecuada si viajas en familia.
Cena en un Estrella Michelin por menos de 5$
Muy cerca del Gardens by the Bay, tenemos plan para cenar ni más ni menos que en el primer puesto de comida callejera del mundo galardonado con una Estrella Michelin: es el Liao Fan Hawker Chan. Podrás comer por unos 4€ (5$). ¿Sugerencias? El plato más solicitado es el Soya Sauce Chicken Rice. Ahí lo dejamos.
Una copa con vistas privilegiadas al skyline
Una de las mejores maneras de despedirnos de Singapur es contemplando su inmensidad desde una ubicación excepcional. Si no sufres de vértigo, es altamente recomendable ascender hasta la planta 63 del edificio 1-Altitude y, a 283 metros sobre la calzada, podrás tener una panorámica impactante de 360 grados de los rascacielos de la ciudad. Dispone de una barra en la terraza donde puedes tomarte un cóctel Singapore Sling amenizado por las vistas del horizonte singapuriense. Sin duda, un gran final para tu Stopover.
Singapore Airlines, nuestra recomendación de vuelo
Singapore Airlines ofrece cinco vuelos por semana entre Barcelona y Singapur con el Airbus A350, uno de los modelos más modernos y sofisticados que existen actualmente en el mercado aeronáutico y que ofrece 3 modalidades de viajar: una Clase Turista renovada, una exclusiva Clase Turista Premium y una de las mejores Clase Business del mercado.
Gracias a su hub en Singapur y a su extensa red de vuelos, Singapore Airlines ofrece la posibilidad de enlazar con total rapidez y comodidad con tu destino final en Asia u Oceanía. En total, la aerolínea, incluyendo su filial SilkAir, conecta Singapur con más de 137 destinos en 37 países diferentes (como Tailandia, Vietnam, Camboya, Indonesia, Japón, Australia, etc).
Changi: quedarse en el mejor aeropuerto del mundo
Solo aterrizar y ya te das cuenta de que te has metido en un mundo aparte. No existe nada parecido en el planeta. Tanto es así, que por séptimo año consecutivo, el aeropuerto Changi ha logrado el primer puesto en los World Airport Awards. Como decíamos es la puerta de entrada a Asia. Cada día pasan miles de pasajeros por Changi y, muchos de ellos, deciden pasar tiempo allí. Es un destino en sí mismo. Este aeropuerto cuenta con miles de experiencias como rutas de shopping por más de 360 comercios, gran selección de restaurantes, cines abiertos las 24 horas, gimnasios, salas de Spa e incluso !5 jardines temáticos!
Por si fuera poco, este mayúsculo aeropuerto inauguró el pasado 17 de abril una nueva terminal llamada Jewel, a la que se llega con un SkyTrain. Se trata de un edificio de 10 plantas y una superficie interior de 137.000 metros cuadrados, que incluye una cúpula de cristal y acero y la cascada interior más alta del mundo, nada más y nada menos que 40 metros.
Ojo: si vuelas con Singapore Airlines o SilkAir y tienes una escala menor de 24 horas en Changi, recibirás un bono valorado en 20 dólares de Singapur para canjear en muchos de los comercios de las zonas públicas del aeropuerto.