6 consejos útiles para viajar en un crucero
Hacer un crucero no es un viaje cualquiera. Es otro asunto bien distinto, incluso otra forma de viajar. Es fácil, cómodo y lleva a los pasajeros por todo el mundo. De hecho, es un tipo de viaje que ha crecido mucho en los últimos años. Ojo al dato: en el año 2006 la cifra de viajeros en crucero llegó a los 15 millones y, en 2018, se alcanzaron los 28 millones de pasajeros.
Hay recorridos cortos, largos y hasta la otra punta del mundo, desde el Mediterráneo a cruzar el Atlántico hasta el Caribe. Puedes ir por mar o por río. Hay cruceros de última hora y cruceros que se planifican con años de antelación. En definitiva, se adaptan mucho a tus necesidades. De todos modos, si tienes decidido que quieres probarlo, aquí tienes 6 consejos que te pueden ser de mucha utilidad.
1. ¿Qué tipo de crucero necesitas?
Cada crucero es único: algunos se especializan en cocina gourmet, experiencias de lujo, itinerarios raros o entretenimientos fuera de lo común (por ejemplo, un crucero de videojuegos). Antes de comprometerte con un crucero, lo mejor es empezar averiguando qué es lo que más te apetece hacer durante tus vacaciones.
Personalmente, la buena comida juega un papel importante en un gran viaje de este tipo. Otras personas podrían preocuparse menos por la gastronomía y pensar más en visitar ciudades portuarias únicas como Roma o Shanghái. Para las familias, lo relevante es que el crucero cuente con algún espacio o club de niños. Averiguar qué es lo más importante para ti, te guiará hacia la marca o el barco específico que mejor se adapte a tus necesidades.
En cuanto a la duración del crucero, evidentemente dependerá de los días que tengas de vacaciones. Los cruceros van desde escapadas de dos noches a una semana, pasando por viajes de 14 noches hasta expediciones mundiales de un año. Los cruceros de hasta siete noches son un lugar seguro para quienes viajan por primera vez y buscan una experiencia de iniciación.
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2. ¿Qué camarote elijo?
Camarote interior: se trata del tipo de cabina más básico, sin ventanas. Genial para las personas que les falta el sueño, ya que la oscuridad ininterrumpida de la habitación puede provocar algunas cabezadas muy necesarias.
Camarote con vistas al mar: similar a una cabina interior, pero con una ventana de ojo de buey. Excelente para las personas que no planean pasar mucho tiempo en la habitación, pero que anhelan una pequeña conexión con el mundo exterior.
Camarote con balcón: habitaciones más espaciosas con áreas para sentarse al aire libre. Ideal para aquellos que buscan un poco de aislamiento, ya que nada es más relajante que un café o un buen libro con el interminable mar azul como telón de fondo.
Suites: puedes encontrar desde mini-suites hasta suites más grandes con múltiples salas de estar, casi siempre con balcón. Perfectas para viajeros que requieren un poco más de espacio o viajan con una familia.
Por otro lado, hay que pensar que los camarotes en la parte delantera del barco (proa) y en la parte trasera del barco (popa) suelen ser menos costosos, ya que es donde más se siente el movimiento del océano. Los camarotes en el medio del barco son los más estables e ideales para quienes son propensos al mareo. Las cabinas "garantizadas" también están disponibles y son rentables: en lugar de elegir la ubicación exacta de su camarote, la línea de cruceros seleccionará el tuyo dentro del tipo de camarote escogido (interior, con vista al mar, balcón o suite).
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3. ¿Cuál es la mejor época para viajar en crucero?
La elección variará mucho en función de cada destino y de cuándo sea su temporada baja o alta. Por ejemplo, las fechas idóneas para reservar un crucero por el Mediterráneo por tema de precio, clima o para evitar las multitudes (especialmente en verano) son en abril y octubre. Si bien en noviembre y marzo también se pueden encontrar buenas ofertas, pero existe un riesgo de bajas temperaturas.
Por otro lado, los cruceros por el Caribe y México están disponibles todo el año, pero si estás dispuesto a enfrentarte a la temporada de huracanes, los mejores precios se pueden encontrar de agosto a octubre. Aunque julio y agosto son los meses más cálidos y populares para cruzar Alaska, los mejores precios se pueden encontrar en mayo, principios de junio y septiembre. Europa y Canadá / Nueva Inglaterra ofrecen precios competitivos en invierno cuando las temperaturas son frías, pero los mejores meses para visitar esta zona son entre abril y noviembre.
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4. ¿Qué destino es el más recomendable?
Los destinos para hacer un crucero son casi infinitos, siendo los más populares para los españoles, los viajes por el Mediterráneo. Desde ciudades como Barcelona, Valencia o Málaga hasta destinos como Roma o Venecia, las Islas Griegas o el Mediterráneo menos occidental, como Córcega y Cerdeña, seguidos de cruceros por el Mediterráneo oriental, como Chipre o Egipto, y cruceros por los Fiordos noruegos, el Mar Báltico y el Caribe.
Elige tu opción: levántate en un lugar nuevo cada día o relájate con un telón de fondo de vistas infinitas del océano. Los cruceros ofrecen lo mejor de ambos mundos con cruceros portuarios e itinerarios tranquilos. En un crucero con carga pesada en el puerto, los huéspedes pasan la mayor parte del tiempo en tierra. Estos viajes llenos de acción ofrecen una gran variedad de excursiones en tierra y se llevan a cabo en el Caribe, Europa y Alaska.
Los cruceros pausados aportan más días en el mar, donde los huéspedes pueden desconectarse realmente del mundo exterior, una rareza en la sociedad actual. Esto incluye cruceros a Hawái que parten de ciudades de la costa oeste y cruceros transatlánticos, donde el barco realiza un viaje de ida entre Estados Unidos y Europa. Los cruceros a las Bermudas son únicos en el sentido de que el barco atraca en un puerto durante varios días, lo que permite pernoctaciones y más tiempo para sumergirse en la cultura de la isla.
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5. ¿Está todo incluido?
Para empezar, ¿qué es el todo incluido? ¿En los cruceros se incluye todo? Pues se incluyen todas las comidas, entretenimiento y alojamiento. ¿Y qué no se incluye? Extras como cócteles, masajes, cenas especiales y visitas frecuentes al casino. Si deseas disfrutar de tratamientos de spa, clases de cocina u otras actividades, busca ofertas con créditos a bordo.
Los paquetes de bebidas ilimitadas tienen el valor más alto para las personas aficionadas al cóctel durante las vacaciones (imagínate no pagar nada por la barra libre, las 24 horas del día, los 7 días de la semana) y los créditos para excursiones en tierra son útiles para aquellos que desean maximizar el tiempo en tierra con actividades y recorridos.
Hay que considerar también si el crucero incluye el vuelo. A veces no es así. En una escapada sin vuelos, conduces hasta el puerto más cercano: hay estacionamientos y garajes a largo plazo disponibles en todos los puertos de cruceros importantes. Las opciones adicionales incluyen paquetes de vuelo + crucero, donde el billete ya está incluido en los precios.
De hecho, las navieras también pueden reservar vuelos a tu nombre, lo que garantiza que los huéspedes llegarán al muelle y saldrán a tiempo. En el caso de retrasos inesperados o cancelaciones de vuelos, es responsabilidad de la compañía de cruceros llevarlo a donde necesita estar, un beneficio algo similar al seguro de viaje.
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6. ¿Es aconsejable viajar en crucero con niños?
El crucero es un magnífico medio para viajar con niños. Nuestra experta de cruceros nos cuenta su experiencia en un crucero en familia.
Navegar en familia es aún más fácil con niñeras a bordo. La mayoría de las principales líneas de cruceros ofrecen al menos un club infantil de cortesía, si no varios, para diferentes grupos de edad, desde niños pequeños hasta adolescentes, para mantener ocupados a los jóvenes. Muchos tienen múltiples áreas de actividades, piscinas para niños, clubes nocturnos para adolescentes y salas de juegos.
Mantenidos constantemente ocupados, los niños nunca se aburrirán a bordo. Los padres pueden relajarse, tener una cita nocturna o experimentar las actividades nocturnas para adultos antes de recoger a los niños.
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